Un mito de la mano por vidrio

habìa una vez una niña llamada Melanie ella vivìa en una casa muy grande, en el bosuqe esta tenìa veinte habitaciones, dos cocinas, un living muy grande y una comedor grande con una mesa muy larga de color blanca. Melanie vivìa con su padre y su madre, Melanie era una niña de diez años, con pelo negro y ojos azules, ella era una niña muy divertida, siempre tenìa una gran sonrisa en su rostro, que con el sol y sus dientes, encandilaba a cualquiera que pasara por alli. Un dìa su mandre estaba cocinando, -¿madre que estas cocinando? preguntò Melanie -cocinando un guiso de arroz. respondiò la madre - pero madre sabes que no me gusta el guiso de arroz. dijo Melanie -¿desde cuando no te gusta el guiso de arroz? dejate de caprichos y ve a tu cuarto. dijo la madre en ese instante llego el padre. -¿que esta pasando aca? preguntò el padre - es que ami no me gusta el guiso de arroz y mamà esta haciendo guiso de arroz. le respondiò Melanie -¿pero a vos no te gustaba el guiso de arroz? preguntò el padre -si, pero antes porque un dìa comì tanto que me asquee. le respondiò Melanie -bueno te lo vas a comer igual y ahora vas a poner la mesa. le dijo el padre Melanie muy enojada fue y agarrò los platos, las servilletas, los vasos, los tenedores, los cuchillos y el mantel,fue a poner la mesa y se le callò todo, lo levanta pero se le habìa roto un vaso, fue agarro la escoba, barriò todo y lo tirò todo a la basura sin nada asi solo, ni con un diario, ella fue agarrò otro vaso y lo puso en la mesa junto a la otra vajilla. Luego se fue a jugar al parque y despuès de media hora, su madre la llamò a comer y ella no iba, no iba y no iba, entonces su madre fue a buscarla y la llevò arrastrando, la sentò a la mesa y Melanie comiò el guiso de arroz. En un momento a Melanie se le derramò el agua en la mesa y la limpiò con la servilleta, la dejò en la mesa. Como habìa tomado mucha agua le agarraron ganas de ir al baño, y mientras fue al baño, su madre agarrò la servilleta y la fue a tirar al tacho de basura, en el momento que Melanie saliò del baño, una mano con un pedazo de vidrio que Melanie habìa tirado al tacho de basura, la empezò a perseguir por toda la casa, luego ella saliò corriendo por el parque y en ese momento ella se acuerda del mito de la mano de la mano en la basura, ese mito trataba de que si uno tira vidrio en la basura sin nada envuelto, una mano saldrà del tacho de basura y te matarà, la madre de Melanie intentò correr atras de la mano para cortarle los dedos, porque el mito tambièn trataba de que si la mano te esta persiguiendo y vos le cortas los dedos, no te podra matar, pero en un momento Melanie se callò al piso y la mano le cortò la cabeza y la matò, la madre se tirò al piso y empezò a llorar y el padre en ese momento estaba en su cuarto entonces no se enterò de nada, pero la madre le gritò y el bajò, el intentò tranquilizarla, pero tambièn el estaba llorando, entonces llamaron a todos sus familiares e hicieron un velorio, como esa casa les traìa muchos recuerdos, decidieron mudarse a otro pais y tener otro hijo, furon a vivir a Inglaterra y tuvieron un hijo llamado Lucrecio, y ellos ahora vivìan en una casa mucho màs chica y viajaban cada 3 meses a visitar a su familia en argentina, una vez ellos pasaron por la casa en la que vivìan antes y vieron el alma de Melanie, esta los saludaba y ella empezò a corer atras del auto, ellos pararon y la subieron, viajò con ellos en el aviòn y se quedo a vivir con ellos en la casa de Inglaterra, cuando Lucrecio creciò le contaron la historia de su hermana y el ahora tambièn la podia ver, entonces una dia el hermano le preguntò a Melanie: -¿porquè tiraste el vidrio sin diario? -porque me olvidè del mito. contestò Melanie - me hubiera gustago conoserte con tu cuerpo. dijo Lucrecio -¡igual me ves asi!. exclamò Melanie - si eso esta buenisimo, nunca pensè que se podìa ver un alma. dijo Lucrecio - tenemos mucha suerte de poder hablar. dijo Melanie - si tenes razòn. Lucrecio Melanie y Lucrecio jugaban juntos hasta que el iba al colegio, su mamà nunca mas les hiso guso de arròz, y cuando se les pompìa un vaso lo envolvìan muy bien en papel de diario. Cuàndo ellos comìan tambièn le ponìan la mesa a el alma de Melanie y ella comìa con ellos, ellos siempre charlaban en la mesa y un dia Melanie dijo: - ¡tengo ganas de comer guiso de arròz! -No te lo voy a hacer porque trae problemas jajajaja. riò la madre - verdad come otra cosa porfavor, no quiero otra tragedia. dijo el padre -¿si hermanita porfavor! exclamò el hermano. Cuando el alma de Melanie empezò a vivir con ellos fue una felicidad inexplicable para la familia,no sentìan tanto vacìo como cuando Melanie muriò, porque ella ahora, aunque sea con el alma vivìa con ellos, ellos fueron felices junto a sus dos hijos y Melanie junto a su nuevo hermano tambièn era muy feliz. -